El rubor en crema ha llegado para cambiar las reglas del juego en el mundo del maquillaje. Esta innovadora textura cremosa para las mejillas está causando furor por sus numerosos beneficios. Si quieres saber absolutamente todo sobre los rubores en crema, tips de aplicación, trucos para sacarles partido y los mejores productos, sigue leyendo.
Resolvemos a continuación todas tus posibles dudas sobre el rubor en crema: desde cómo se aplica correctamente y con qué herramientas, hasta diferencias con el rubor en polvo, mitos y realidades, y productos imprescindibles que tienes que probar sí o sí. ¡Toma buena nota!
Orígenes del rubor en crema
Para entender este revolucionario formato, primero hagamos un poco de historia.
Los orígenes se remontan a la época del Antiguo Egipto, donde tanto hombres como mujeres ya utilizaban mezclas naturales para ruborizar sus mejillas. Pigmentos rojos extraídos de plantas, flores y minerales eran la base de estas primitivas fórmulas.
Más adelante, en la era victoriana, el rubor en polvo se popularizó gracias a marcas como Bourjois. Pero no fue hasta los locos años 20 cuando el rubor cremoso hizo su aparición.
Nacimiento del rubor en crema moderno
Se atribuye la invención del rubor cremoso moderno a Madam C.J. Walker, considerada la primera mujer afroamericana millonaria gracias a sus innovadores productos de belleza. En 1917 lanzó un «rouge cremoso» que causó sensación.
Ya en los años 60, Max Factor capitalizó este invento lanzando sus famosos rubores «Creme Puff». Tenían una textura innovadora que se difuminaba fácilmente con los dedos.
El resto es historia. El rubor crema no ha parado de ganar popularidad hasta la actualidad, con lanzamientos virales como el Cloud Paint de Glossier.
Cómo aplicar correctamente el rubor en crema
Aplicar el rubor en crema puede parecer complicado al principio. Pero en realidad es muy sencillo si sigues estos pasos:
Prepara la piel
- Lava e hidrata la piel antes de aplicar el rubor. Así se extenderá mejor.
Deposita el producto
- Deposita una pequeña cantidad de rubor sobre el dorso de la mano. Una cantidad similar al tamaño de un guisante será más que suficiente.
Toma el producto con la brocha
- Con la brocha de rubor, tómalo y llévalo hasta los pómulos dibujando una forma de media luna.
Difumina
- Con suaves toques circulares o presionando ligeramente, difumina el rubor desde la zona más alta del pómulo hacia las sienes.
Fija el maquillaje
- Para fijarlo y que dure más tiempo, aplica un poco de polvos translúcidos encima con ayuda de una brocha grande.
¡Y ya está! Con estos sencillos pasos lograrás un acabado natural y radiante.
Brochas imprescindibles para aplicar rubor en crema
Elegir la brocha adecuada es clave, ya que no sirve cualquier brocha para aplicar correctamente un rubor en crema. Las mejores opciones son:
- Brochas de cerdas naturales: son las ideales, porque permiten tanto coger el producto como difuminarlo después. Elige cerdas suaves para un acabado más sutil.
- Brochas de silicona: al no absorber nada de producto son perfectas para cremas y líquidos. Permiten un control total.
- Brochas dobles: tienen cerdas a dos alturas, lo que facilita recoger y extender el rubor en un solo gesto. ¡Muy prácticas!
Sea cual sea la brocha, asegúrate de que tenga la forma redondeada clásica para adaptarse a los pómulos.
¿Cómo preparar tu propio rubor cremoso casero?
Preparar tu propio rubor cremoso casero es más sencillo de lo que piensas. Sólo necesitas unos pocos ingredientes:
- Una cera como la de abeja o candelilla, que hará de emulgente.
- Un aceite como el de almendras dulces, que aportará untuosidad.
- Pigmentos naturales en polvo para dar color, como raíz de remolacha o fresas secas.
- Aceites esenciales opcionales para perfumar.
El proceso consiste en:
- Derretir la cera a baño maría.
- Mezclarla con el aceite y los pigmentos.
- Batir la mezcla hasta que espese.
- Verterla en un envase y ¡listo!
Tendrás tu rubor cremoso 100% natural. ¡Atrévete a hacer el tuyo!
Los mejores rubores en crema del mercado
Existe una amplia variedad de marcas que han lanzado sus rubores en este innovador formato cremoso. Estos son algunos de los más populares:
Glossier Cloud Paint
- Fórmula ligera de gel-crema que se funde con la piel.
- Acabado natural y translúcido. Ideal para looks «sin maquillaje».
- Amplia gama de colores para todos los tonos de piel.
NARS Multiple Stick
- Barra multifunción para mejillas, labios y ojos.
- Textura cremosa ultrafundente que se desliza como la seda.
- Colores intensos y pigmentados.
Too Faced Fruit Creme Blush
- Con extractos de frutas y aloe vera en su fórmula.
- Fragancia fresca y dulce.
- Tono luminoso y vitamina E antioxidante.
Dior Backstage Rosy Glow
- Ofrece un rubor en gel para un efecto húmedo.
- Acabado natural de rubor al salir de hacer deporte.
- Disponible en 4 tonos universales.
¡Prueba varios y encuentra tu rubor en crema favorito!
Rubor crema para piel grasa: ¿ideal o no?
Una duda frecuente es si el rubor en crema es adecuado para pieles grasas o con tendencia acneica. La respuesta es un rotundo ¡sí!
De hecho, presenta varias ventajas para este tipo de pieles:
- No contiene talco: a diferencia de los rubores en polvo, la crema no obstruye los poros.
- Textura ligera: se absorbe mejor y no deja sensación pesada.
- Fácil de difuminar: se mimetiza con la piel grasa y luce natural.
Eso sí, debes tener ciertas precauciones:
- Aplica el producto sólo con brocha, no con los dedos.
- Elige tonos claros que no aporten más color al rostro brillante.
- No excedas la cantidad y difumina bien para evitar efecto pesado.
Siguiendo estos consejos, ¡el rubor crema será tu mejor aliado!
Diferencias entre rubor en polvo y en crema
Aunque ambos tienen el mismo objetivo (ruborizar las mejillas), existen claras diferencias entre el rubor en polvo tradicional y el innovador formato en crema:
- Textura: Los polvos son secos y pueden asentarse en líneas de expresión. La crema es hidratante.
- Acabado: El rubor en polvo tiene un aspecto más mate. La crema aporta luminosidad.
- Herramientas: Los polvos requieren brochas más grandes. La crema necesita brochas específicas.
- Intensidad: Los polvos pigmentan mucho con poco producto. La crema permite buildable para un control más preciso.
- Duración: Correctamente aplicados, tanto polvos como cremas pueden durar horas.
¡Cada formato tiene sus ventajas! Elige el tuyo según tus necesidades y tipo de piel.
Mitos y realidades sobre el rubor crema
Desmontamos a continuación algunos mitos extendidos sobre los rubores en crema:
«No duran nada en la piel»
FALSO. Todo depende de la calidad y la forma de aplicación. Si usas un buen producto y lo trabajas bien sobre la piel, pueden durar perfectamente 8 horas o más.
«Sólo sirven para pieles secas»
FALSO. Al contrario, las cremas aportan hidratación, así que están bien para todo tipo de pieles. Incluso las grasas se beneficiarán de la textura ligera.
«Dejan la piel llena de granitos y manchas»
DEPENDE. Si aplicas el rubor sobre una buena base que minimice la aparición de poros y lo difuminas bien, esto no debería ocurrir.
«Sólo permiten looks naturales»
FALSO. Los rubores en crema son tan versátiles que puedes conseguir desde acabados imperceptibles hasta efectos súper intensos y llamativos.
Para qué sirve el rubor en crema
Más allá de ruborizar las mejillas, el innovador formato cremoso tiene múltiples beneficios:
- Ruborizar de forma natural el área de los pómulos.
- Hidratar la delicada piel del rostro.
- Luminosidad, gracias a sus pigmentos perlados que reflejan la luz.
- Definir los pómulos y esculpir el óvalo facial.
- Resaltar el tono natural de la piel.
- Crear contraste cuando se usan bases de maquillaje.
- Corregir falta de color en ciertas zonas.
Como ves, ¡tiene muchas utilidades! Imprescindible en cualquier neceser de maquillaje.
Curiosidades y anécdotas en torno al rubor
La cultura en torno a ruborizarse y el uso del rubor a lo largo de la historia está llena de fascinantes anécdotas:
- Originalmente, «rubor» se refería al enrojecimiento natural de la cara al sentir vergüenza. De ahí que signifique sonrojarse.
- En la época victoriana, se consideraba atractivo tener las mejillas sonrosadas, así que el rubor en polvo se popularizó.
- Dicen que la bailarina Lola Montez añadía cera de abeja a sus rubores en polvo para conseguir una textura cremosa. ¡Una visionaria!
- En los 80, se puso de moda aplicar el rubor en llamativos trazos horizontales imitando el estilo de las muñecas.
- Marilyn Monroe o Madonna contribuyeron a la fama del rubor crema con sus looks icónicos.
- Se atribuye a la musa Cleo de Merode la creación del primer rubor crema usando pigmentos naturales.
¡La historia del rubor está llena de curiosas anécdotas! Y hoy en día sigue más vigente que nunca en su versión cremosa.